WASHINGTON
Fuente: Excelsior.com
El futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump, llega al cargo mañana dispuesto a sacudir la política exterior y mostrar intereses expansionistas.
Groenlandia, Panamá y Canadá encabezan la lista de sus prioridades para definir un nuevo mapa estadunidense.
Trump no descartó la vía militar para apoderarse de Groenlandia, un territorio autónomo de Dinamarca, aliado de la OTAN.
Asimismo, anunció un interés de dominar nuevamente el Canal de Panamá, la vía fluvial vital que Estados Unidos entregó hace 25 años. Bajo la excusa de un dominio chino de la zona.
Mike Waltz, asesor de seguridad nacional del gobierno entrante, señaló la influencia de las empresas de origen chino en el Canal de Panamá así como el ejercicio de poder ruso en el Ártico.
“Siempre van a estar todas las opciones sobre la mesa”, declaró el futuro funcionario.
Trump también se ha burlado de Canadá, otro aliado de la OTAN y país vecino amigo de larga data, sugiriendo que debería convertirse en el estado número 51 de Estados Unidos o enfrentar aranceles, su método de presión favorito que usa con amigos y enemigos.
De hecho, en sus redes sociales publicó un mapa de Norteamérica en el que EU y Canadá aparecen con los colores de su país.
Además de esto, se suman las tensiones con los enemigos de la Casa Blanca durante su primera administración, Rusia y China.
Robert Benson, analista de políticas en el Center for American Progress, afirmó que Trump señala la amenaza de una “Rusia revanchista y una China expansionista”.
“Está equivocado en la forma en que ha alejado a sus aliados, presionando a socios europeos, particularmente para que se distancien de Estados Unidos”, dijo el especialista.
Si bien Trump busca impactar en ciertas zonas, en su equipo hay figuras tradicionales del Partido Republicano y políticos de mano dura.
Tal es el caso de Waltz, quien es veterano de Afganistán y congresista, y Marco Rubio, candidato a secretario de Estado.
Ambos están a favor de un enfoque centrado en la seguridad, y se espera que Rubio se enfoque más en contrarrestar a los gobiernos izquierdistas en América Latina, en particular Cuba y Venezuela.
Durante su campaña, Trump se jactó de ser capaz de poner fin a la guerra de Ucrania en un día.
El republicano nombró a un respetado teniente general retirado, Keith Kellogg, como enviado a Ucrania, y Waltz inicialmente habló de fortalecer a Ucrania para que tenga una mejor posición de negociación.
Waltz dijo que la presencia de Trump ya era un triunfo al revivir las perspectivas de diplomacia en un conflicto “estancado en una trituradora de personas y recursos al estilo de la Primera Guerra Mundial, con consecuencias de la Tercera Guerra Mundial”.
En reiteradas ocasiones, Trump se ha manifestado a favor de que su país abandone la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), lo que pone en riesgo precisamente a Ucrania.
“Encontramos una idea clara de cuáles son los intereses de Estados Unidos, pero también una disponibilidad para discutir las cosas, empezando por la continuación del apoyo a Ucrania. Eso nos sorprendió”, dijo Lia Quartapelle, presidenta del comité de Relaciones Exteriores de Italia.
Eventos
La ceremonia de investidura se retransmitirá en vivo en el Capital One Arena, en el centro de Washington, recinto de los Wizards, de la NBA, con capacidad para unas 20,000 personas.
La fecha en la que regresa Trump a la presidencia coincide con el Día de Martin Luther King.
Los eventos comenzaron anoche con una recepción y una cena del gabinete.